Uno de los objetivos primordiales de los líderes del mundo es reducir los riesgos de desastres mediante su prevención; sin embargo, no siempre es posible, y por lo que se busca entonces una reducción de los daños a las personas y los bienes.
Para las autoridades a nivel global es menester no sólo que exista un aviso antes de que los desastres sucedan, también es prioridad que los daños por algo que es inevitable sean mínimos. Esto quiere decir que las poblaciones o los sectores en riesgo puedan actuar de manera oportuna para evitar una desgracia.
En búsqueda de una solución viable y oportuna para lograr dicho objetivo, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 13 de octubre como el Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres, y así promover una cultura global al respecto.
El 13 de octubre de 2020, la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (undrr, por sus siglas en inglés) emitió un informe sobre el impacto de estos fenómenos, documento en el que se muestran las acciones realizadas durante toda la jornada como parte del activismo para concientizar a la población sobre la reducción del riesgo de desastres.
La campaña se lanzó en septiembre de ese año y tuvo un alcance de 8 300 personas que respondieron al llamado. Además, dentro del informe se expone que se produjeron diversos materiales que fueron publicados en las redes sociales de la UNDRR.
Aunado a este contenido, se creó una revista digital que tuvo un alcance de 5 500 personas, además de realizarse sesiones de preguntas y respuestas en Facebook sobre cómo mantener el control por parte de las autoridades en respuesta a cualquier riesgo.
Siguiendo por la línea de las conferencias sobre temas de interés para las personas que seguían las actividades, se publicó un webinar sobre los riesgos en las Américas y el Caribe con casi 500 participantes y más de 10 000 espectadores. Aunque no fue el único realizado; en total se llevaron a cabo siete webinars externos a la organización de la undrr, así como el lanzamiento de una herramienta de estimación para ayudar a comprender riesgos.
El alcance en redes sociales fue de 66 mil personas y se habló de la iniciativa en distintos medios regionales. La importancia de generar espacios como éstos en los que se socialice el conocimiento a escala internacional es cada vez mayor, ya que actualmente vivimos en una cotidianidad en un constante riesgo de desastres. Un ejemplo claro es la pandemia por covid-19.
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